Adriana Abaca, Norma Castaño y Betina Zubeldía son las madres antinarcos de la provincia de Santa Fé que denunciaron al ex jefe de la policía detenido por sus vínculos narcos, Hugo Tognoli, y que ayer miércoles 3 de diciembre encabezaron la marcha en reclamo de justicia por Norma Bustos a la Casa de la provincia en la Capital Federal y hasta el Ministerio de Justicia y DD.HH. Nacional.
Los funcionarios que responden al gobernador Antonio Bonfatti blindaron con vallas y policías a la Casa provincia (en 25 de Mayo 178) y no recibieron a la madres, por lo que no se pudo plantear el reclamo de los asesinatos impunes y la falta de centros para adictos. Mientras que el Ministerio de Justicia si recibió a las denunciantes de los narcos.
Los funcionarios nacionales prometieron a las madres garantizar la seguridad con gendarmería, abrir el dialogo para que se cree un centro de recuperación gratuito en la ciudad de Pérez cerca de Rosario. Además a Cristina Ojeda, la madre de las chicas asesinadas a martillazos, se la asistirá en su urgencia laboral porque tras la trascendencia mediática lleva a que nadie la contrate.
Mientras ocurría la movilización que el gobernador Bonfatti se compró un Bora blindado.
Por otra parte desde Italia llegó un apoyo de la red Anti mafia Libera, que envió una carta al embajador argentino en Italia, Torcuato Di Tella, donde le exige justicia por Norma Bustos y que se implemente un sistema de protección de testigos y la creación de los centros de recuperación de adictos.
Organizaciones marcharon a la Casa de Santa Fe para reclamar justicia por víctimas de los narcos, pero no fueron recibidas
La Fundación La Alameda y otras organizaciones marcharon hoy hacia la Casa de Santa Fe por el microcentro porteño para reclamar justicia por Norma Busto, asesinada por narcos en Rosario tras denunciar el crimen de su hijo, y por las “más de 400 víctimas que hubo”, pero finalmente no fueron recibidos por las autoridades.
En ese sentido, uno de los organizadores de la movilización reveló a NA que estaba todo acordado para que los recibieran y le presentaran un petitorio para pedir justicia.
Asimismo, le iban a entregar un petitorio para que el gobernador santafesino, Antonio Bonfatti, incorpore a la Ley de Emergencia en seguridad de la provincia los artículos que “él mismo vetó” y que están “vinculados a la creación de centros para adictos”.
Sin embargo, al llegar a la casa de Santa Fe se encontraron con que estaba todo vallado, con policías custodiando la zona, y sin ninguna autoridades que los fuera a recibir, cuando ya habían acordado todo.
“Parece que al gobernador Bonfatti no le interesa esclarecer el crimen de Norma ni el de otras víctimas de los narcos. Ni tampoco desea crear centros para adictos”, remarcó Matías uno de los asistentes a la marcha.
En ese sentido, recordaron que semanas atrás habían dejado una lista con los bunkers de droga en Rosario, pero en La Alameda consideraron que “no se investigó”.
Posteriormente, los manifestantes se trasladaron al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos para hacer el mismo pedido.
De la marcha participaron los legisladores porteños de La Alameda Gustavo Vera y Pablo Bergel, las “Madres Solidarias” de Santa Fe -aquellas que luchan para que sus hijos salgan de las adicciones a las drogas y quienes denunciaron en su momento al jefe de Policía de esa provincia Hugo Tognoli-, la agrupación de la red Antimafia de Rosario.
También participaron María Luján Rey, mamá de Lucas Menghini Rey, una de las 52 víctimas de la tragedia de Once, el secretario de Derechos Humanos de la CGT Azopardo y secretario general de los Judiciales, Julio Piumato, y las Madres de la ciudad de Buenos Aires que denuncian a los narcos.